Los objetivos empresariales son un pilar fundamental para determinar hacia dónde quieres que se dirija cada área de la empresa. Iniciar el año con ellos bien planificados en Recursos Humanos es crucial, ya que no solo establece un rumbo claro, sino que también sienta las bases para un crecimiento sostenido y medible.
En este artículo vas a conocer algunas estrategias para fijar estas metas y potenciar el desempeño del departamento de Recursos Humanos.
4 consejos para establecer objetivos empresariales del departamento de Recursos Humanos
Observa lo que viene en esta lista y hazte con las herramientas necesarias para que logres una planeación de Recursos Humanos firme. Esto te permitirá obtener los datos necesarios para trazar la ruta hacia procesos internos más eficientes y poder hacerle frente a los desafíos y tendencias que se avecinan en el año próximo.
1. Lleva a cabo un análisis SWOT
El análisis SWOT te permite analizar 4 aspectos de esta área:
- Fortalezas: los puntos aprovechables, como un equipo bien capacitado o tecnología de punta.
- Debilidades: aquello que necesita más trabajo y ajustes, por ejemplo, el uso de instrumentos obsoletos, o poca comunicación con el personal.
- Oportunidades: lo que puedes utilizar para mejorar, por ejemplo, el tener un buen presupuesto, un cambio positivo en la legislación laboral, o automatización de procesos.
- Amenazas: esos factores que no puedes controlar y que son un obstáculo potencial, como una baja competencia del equipo y escasez de talento.
Su aplicación en el departamento de Recursos Humanos es útil para determinar el punto de partida y, desde de ahí, trazar acciones estratégicas con base en fundamentos concretos.
2. Establece metas SMART
La metodología SMART se centra en que los objetivos sean:
- Específicos: para acordar lo que quieres, con acciones claras.
- Medibles: teniendo métricas que te permitan saber si llegaste a dicha cifra o no.
- Alcanzables: realistas y acordes a las capacidades de la organización.
- Relevantes: alineados con la misión, visión y necesidades empresariales.
- Temporales: con un periodo acotado para lograrlos.
Como ejemplo muy breve y práctico, se puede mencionar que una empresa tiene como meta disminuir un 10% la rotación de personal. En cuyo caso, los criterios de la metodología quedarían así:
- Específico: evitar la rotación al ofrecer bonos extras y capacitaciones.
- Medible: se busca una disminución del 10%.
- Alcanzable: la empresa tiene los recursos suficientes para ofrecer cursos y estímulos económicos a los colaboradores.
- Relevante: si los trabajadores no abandonan la empresa, esta no pierde recursos y la productividad se mantiene.
- Temporales: esto se puede ver en un año.
3. Determina cada KPI de Recursos Humanos
Ya que sabes los objetivos que quieres alcanzar, es momento de poner sobre la mesa los indicadores clave de desempeño que te servirán para observar el progreso y medirlo. Estos factores pueden incluir la retención del personal, los niveles de desempeño y de satisfacción de los empleados, diversidad e inclusión en la empresa, así como la tasa y los tiempos de contratación, efectividad del onboarding, entre otros.
4. Ten un plan de acción e involucra a todo el equipo
Para que los objetivos impacten positivamente a toda la organización, no solo al área de Recursos Humanos, debes definir un plan de acción que incluya los pasos a seguir, los tiempos y las tareas específicas a realizar. Lo ideal es que participen tanto líderes como empleados, involucrándolos en actividades y procesos de retroalimentación.
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